jueves, 14 de abril de 2011

Mi hija con SVC

Hola, tengo una hija con 10 años, desde bien pequeña sufre crisis de vómitos, cada 3- 4 meses aproximadamente, a ella le vienen durando unos 4-5 días lo que me obliga a ingresarla, durante 3días aprox.
Sus ataques suelen venir durante el día y puede vomitar mas o menos 8 -10 veces a la hora, algo muy exagerado. Sus vomiteras comienzan sobre las 6-7 de la mañana pero las noches más o menos las pasa tranquilas, sabiendo la paliza que ya lleva en el cuerpo.
Los médicos llevan diciendo años que son vomitos ciclicos, pero la verdad que hasta este año no se le ha hecho ninguna prueba para ir descartando intolerancias de las que ha dado negativa.
Estoy muy perdida, me gustaría saber si en España hay algun especialista que me explique con claridad esto. Lo que leo de la enfermedad no coincide con las caracteristicas de mi hija.
Me dicen los medicos que la pobre se intoxica y que cuando su cuerpo se copa empiezan los vómitos.
En fin seguiré viendo y esperando tener noticias de alguien que me pueda aclarar puntos sobre esto.
Gracias

Más de 50 años con SVC

Trasmíteles a la gente de mi parte que no se desanimen, que yo lo he padecido desde los 2-3 años y echándole coraje, aquí estoy con 53 y habiendo llevado una vida relativamente normal.

Es verdad que ahora ya no los tengo tan frecuentes y me los controlo bastante bien. Pero hasta los 14-15 los tuve bastante frecuentes (creo recordar que aproximadamente 1 vez al mes) con duraciones de 48 horas, y eso no me impidió seguir estudiando, claro que había que hacer un esfuerzo extra cuando estaba bien, pero con fuerza de voluntad y coraje se puede.

Algo importante es el miedo que se tiene a tener una crisis, y creo que aquí los padres tienen un papel importante no metiéndole más miedo sino dentro de lo posible, dejarles hacer una vida lo más normal posible, salir, ir con amigos, jugar, estudiar, etc...., y tratar de que vean que cuando les empiece una crisis ellos los pueden recoger allí donde estén sin problemas.

Hoy hay móviles y es más fácil, cuando yo era niña no había móviles, pero mi madre intentaba que yo llevara una vida y no me encerrara. Creo que he regado de vómitos la mitad de las calles de Granada, pero había que seguir para delante. Tengo claro que cuanto más severo es el caso es más difícil pero sino hay otras enfermedades asociadas que lo compliquen, hay que tirar para delante.