Pocos se deciden a escribir su historia, su vivencia. Mis
relatos siempre son referentes a mi hijo, pero esta vez en mi post quiero
comentar dos vivencias que me han expuesto
y están teniendo un desenlace feliz y
ellos, como es normal, se olvidan de compartir con nosotros estos días de bienestar.
Mi narración es sobre una niña y una joven que “vomitaban
sin parar” no explico sus crisis ya que todos sabemos lo que estas significan.
La madre de la pequeña me explicó que en su país desconocían
el síndrome y ella en Internet encontró Red
de Amor en dónde algunos de nosotros vamos exponiendo nuestros casos.
Después descubrió el grupo de facebook de la AESVC y con los datos que encontró
llegó a la conclusión que era la enfermedad que padecía su hija desde hacía
tantos años. Con esta información fue a su gastroenterólogo y éste le puso un tratamiento, por cierto muy
acertado, ya que hace seis meses que no
tiene una crisis.
La otra historia hace
referencia a una chica que después de varios años de lucha y
desesperación está viendo la luz, ella también lleva seis meses sin vómitos.
Finalmente consigue hacer todas aquellas cosas que había soñado y que los vómitos
no le permitían realizar. Puede
disfrutar de su pequeña, estudiar, sacarse el carnet de conducir, salir con sus
amigas, divertirse, en resumen algo tan sencillo como disfrutar de la vida
junto a su familia y amigos.
